sábado, 6 de octubre de 2012

Me cansé

Ya no me importa nada de vos. Me demostraste un orgullo interminable de tu parte, me di cuenta de que ya no me necesitás para nada y yo tampoco te necesito a vos.
Me lo demostraste, me lo hiciste ver: yo ya no te necesito.
Me cansé de hablarte a pesar de todo, de ayudarte, de aconsejarte, me cansé, me cansé y me cansé.
Si querés morirte, hacelo. Si querés cortarte, hacelo. Hacé lo que quieras, lo que se te plazca. Cuando me busqués para algún estúpido consejo, no voy a estar.
No me busqués porque yo ya no te voy a buscar a vos. No necesito ni un simple "hola" desanimado y orgulloso.
Ya tengo hombros que me van a aguantar para cuando llore, ya tengo una boca que me de consejos, lo tengo todo. 
Una vez más, hacé lo que quieras; ¿querés comer? Comé. ¿No querés comer? No comas. ¿Extrañás a alguien? Extrañalo. ¿Te cortás? Cortate. 
Pero olvidate de mí, no me nombres nunca más porque yo ya me fui. Me habré muerto, pero reviví. 
Gracias.
Rocío hacé lo que quieras. Si te querés suicidar, hacelo. Si te querés desangrar cortándote las muñecas, hacelo.
Malena ya no está, para vos ya no existo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario